Las escápulas aladas, una condición que afecta la postura y la salud de tu espalda y a menudo el único inconveniente de una figura impecable.
En este artículo, exploraremos qué son las escápulas aladas, sus causas, síntomas y cómo abordar este problema de forma efectiva para lograr una espalda fuerte y saludable.
¿Qué son las escápulas aladas?
Las escápulas aladas, son una condición en la cual las alas de los omóplatos (escápulas) sobresalen en la espalda en lugar de permanecer planas y pegadas al cuerpo. Esto puede resultar en una apariencia estéticamente desfavorable, así como en diversos síntomas molestos.
Causas de las escápulas aladas
Pueden ser causadas por una variedad de factores, incluyendo debilidad o lesiones en los músculos que estabilizan los omóplatos, como el músculo serrato anterior. Otras posibles causas incluyen traumatismos en el área de los hombros, compresión nerviosa y afecciones neuromusculares, como la distrofia muscular.
Síntomas asociados
Además de la apariencia visible de las escápulas aladas, los síntomas comunes incluyen
- Dolor en la espalda,
- Fatiga muscular,
- Limitación en la movilidad del hombro y dificultad para realizar ciertos movimientos o ejercicios.
Estos síntomas pueden afectar negativamente nuestra calidad de vida y nuestra participación en actividades físicas.
¿Cómo abordar las escápulas aladas?
Si sospechas que tienes escápulas aladas, es importante buscar el diagnóstico y la orientación de un profesional de la salud, como un fisioterapeuta o médico especializado en medicina deportiva. Ellos podrán realizar una evaluación adecuada y recomendar un plan de tratamiento individualizado.
El tratamiento para las escápulas aladas generalmente implica ejercicios de fortalecimiento y estiramiento de los músculos que rodean los omóplatos, en particular el músculo serrato anterior. Estos ejercicios ayudarán a mejorar la estabilidad y la función de los omóplatos, reduciendo así los síntomas y corrigiendo la apariencia de las escapulas aladas.
Además de los ejercicios específicos, es importante mantener una postura adecuada en todo momento. Evita encorvar los hombros hacia adelante y asegúrate de sentarte y pararte erguido(a) con los omóplatos ligeramente retraídos. La conciencia postural es clave para mantener una espalda fuerte y saludable.
Ejercicios para fortalecer los músculos
Si te preguntas cómo corregir las escápulas aladas, la respuesta está en fortalecer los músculos adecuados. El entrenamiento con LPF/Hipopresivos es una excelente alteranativa para tonificar, fortalecer y activar la cintura escapular.
Aquí te presentamos dos ejercicios efectivos que puedes realizar, ya sea con la técnica hipopresiva o sin ella:
- Plancha de pared: colócate frente a una pared, apoya tus manos a la altura de los hombros y mantén el cuerpo recto. Presiona contra la pared como si quisieras empujarla. Mantén la posición durante 30 segundos y repite varias veces.
- Flexiones de escápula: puedes hacerlo en pared o boca abajo en posición de plancha, apoya los antebrazos y levanta el pecho, manteniendo la espalda recta. Contrae los omóplatos empujando con los codos la superficie en la que estas apoyado y mantén la posición durante 10 segundos antes de relajarlos. Realiza varias repeticiones.
Recuerda realizar estos ejercicios de forma regular, al menos tres veces por semana, para obtener resultados óptimos.
